En contra de lo que opina mi respetada y admirada Carmen Pacheco, yo voy a escribir sobre todo lo carente de importancia y seguramente de reflexión. ¿Y porqué pertrecharé esto?, pues por una sencilla razón, se que no soy Garcia Marquez, pero me aburro mucho en mi trabajo, no me aburre el trabajo en sí, me aburre la carestía de trabajo actual. No se si aguantaremos un año más, porque el teléfono ya tiene telarañas. Trabajo como secretaria en un pequeño despacho de 3 abogados, me encargo un poco de todo. Al contrario que muchas empresas el jefe supremo se resiste a prescindir de mi presencia en la oficina y prefiere que esté leyendo a Kafka a reducirme la jornada laboral. Es por ello que me paso muchas horas dedicada a la lectura, tanto impresa como por internet, ayer por ejemplo me dediqué toda la tarde a leer sobre la corriente alterna y Nikola Tesla.
Bueno ahora mismo no tengo más que decir, me voy al banco a hacer unas gestiones.
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